
Peccata Minuta (Déjanos caer en la tentación), —una coproducción de las jóvenes compañías valencianas Francachela, de Valencia, y Teatro Íntimo, de Villena—, invita al espectador a una travesía sensorial por las debilidades humanas y los deseos ocultos en un particular escenario: los despachos y habitaciones del edificio modernista del Ateneo Sueco del Socorro. En grupos de diez personas, los espectadores recorrerán las distintas estancias del edificio en las que se encontrarán cara a cara con las perversiones más recónditas. El vicio del juego, la decadencia del alma, la alquímia purificadora, la fascinación por las bizarrías o la doble visión de los espejos habitan detrás de las puertas que el espectador-viajero podrá abrir, visitar y compartir. Un trabajo ligado a la cercanía del espectador, en el que los sonidos, los olores, el gesto y el tacto serán los estímulos que nos guiarán por las distintas alcobas en este ritual escénico.
Nacida en 2008, Francachela apuesta por los montajes atrevidos, en espacios y planteamientos singulares, que proponen un nuevo juego de relación con el público. En 2009 estrenó en el MIM su Menú Degustoacción y este año regresa a Sueca para estrenar Peccata minuta junto a Teatro Íntimo, colectivo que centra su trabajo en la exploración de las condiciones escénico-artísticas que deben darse para conectar de manera sincera con el público.
No hay comentarios:
Publicar un comentario